LA OREJA VERDE

LA OREJA VERDE

(…) Oye también a los niños cuando cuentan cosas

que a una oreja madura parecerían misteriosas.

Gianni Rodari

Cuando gente madura se para a escuchar a los niños con una oreja todavía verde, ocurren estas cosas…

RODARI, LOS PAJARITOS Y EL PAPÁ DE SERENA

El papá de Serena (6 años), es italiano. La niña cuenta ilusionada que preguntará en casa, porque quizá su papá conozca a Rodari. Cuando, días más tarde, le preguntamos, nos cuenta lo siguiente:

“Pantelería” – comienza diciendo…

-¿Cómo? ¿Pastelería?

- No, no, “Pantelería”; es una montaña que de lejos es pequeña, pero cuando estás allí, ya es grande. Mi papá tiene pajaritos que ganan muchos trofeos. Él, de mayor, no conoce a Rodari, pero de bebé sí lo conoció. Lo conoció en Pantelleria porque era Rodari el que ponía los trofeos de los pajaritos, escribía los nombres de los trofeos con un rotulador para trofeos. Eso hacía Rodari.

Es muy probable que Serena inventara sobre la marcha esta encantadora historia para resarcirse de la decepción de que su papá, siendo italiano, no conociera a Rodari. Sin embargo, la invención en sí, no deja de ser un ejercicio-homenaje de lo más rodariano. No obstante, la curiosidad me corroe, indago y, efectivamente, Pantelleria existe. Es una paradisíaca isla volcánica entre las costas de Sicilia y África. (?)

¿EL MUNDO ES BONITO?

Leo a un grupo de 2º un “cuento por teléfono” titulado “Brif, braf, bruf”. Termina planteando que el mundo es bonito, dato final que no llama especialmente la atención, puesto que sorprende más en el cuento el uso de un disparatado lenguaje inventado. Sin embargo, cuando termino la narración, se oye un rotundo: -¡No!

Es María. Dice que no está de acuerdo, que el mundo no es bonito, porque hay guerras y esas cosas.

Se genera en el grupo todo un debate sobre lo bonito y lo feo de este mundo.

YO ME PREGUNTO

En los grupos de 2º y 3er ciclo hablamos en algún momento sobre “El libro de los porqués” de Rodari, sobre la ausencia, a veces, de orejas verdes, sobre la piedra en el estanque… Y los niños empiezan a expresarse:

- Cuando lanzamos una piedra al estanque ocurre que se rompe mi reflejo.

- Yo, a veces, le digo muy disgustada a mi madre que mi hermano me ha pegado y ni siquiera me escucha.

- Yo le digo que tengo miedo y me dice que eso son tonterías.

- Yo siempre me pregunto qué estarán pensando los demás.

- ¿Por qué las cosas se llaman como se llaman y no de otra manera?

- ¿Por qué Rodari firmó con pseudónimos durante algún tiempo? (…)

¡Hagamos un cuaderno colectivo de preguntas para la clase!

LA GRAN IDEA DE SAMUEL

En otro grupo de 2º, nos aventuramos al interior de la imagen de un libro. Se trata de un libro-puerta que se abre a un bosque. Los niños comienzan a poblarlo de personajes: un protagonista llamado José Miguel, Caperucita de Colores montada a lomos del Elefante Elmer, siete enanos…

De pronto Samuel, como sacudido por un rayo, exclama: ¡Tengo una idea!

Ha visto en el aula la puerta mágica, está allí mismo; es un triste panel de corcho vacío. Samuel propone convertirlo en el escenario de la historia que acaban de inventar. Todo el grupo se lanza manos a la obra a tomar acuerdos sobre quién dibuja a cada personaje, cada árbol del bosque…

El teatrillo está en construcción.

¿QUÉ HAY DEBAJO DEL SOMBRERO?

En E.I., a raíz de un álbum ilustrado, jugamos con sombreros fantásticos. Pero dentro del sombrero está la cabeza, en la cabeza el pelo, los ojos, nariz… ¿Y dentro de la cabeza? Dan sus explicaciones al mismo tiempo que las dibujan en la pizarra:

- Dentro de la cabeza está el celebro, Me lo imagino como un corazón pero que no es un corazón. – Nos explica Carmen y le dibuja rayas formando cuadritos.

- ¿Son cajoncitos?

- No, son cables.

- ¡Yo sé algo, yo sé una cosa! – dice otro niño. – El corazón, está en la barriga, no en la cabeza, pero yo sé que hace bom-bom, bom-bom, y entonces hace que la sangre suba al celebro. ¡Necesito tiza roja para pintarlo!