OTRO CUMPLEAÑOS

65 añitos cumple aquel legendario personaje conocido en España como "Pipi Calzaslargas" y cuyo nombre original era "Pippa (o Pippi) Langstrump".

Nació en formato de libro en 1945 cuando la autora sueca, Astrid Lindgren, - tras haberse inventado todas aquellas historias para contárselas a su hija -, decidió presentarlas a un concurso literario. Las aventuras de Pippa fueron traducidas a 70 idiomas y, obtuvieron aún mayor éxito cuando se convirtieron en serie para TV, con guiones de la propia Lindgren y dirección de Olle Hellbom.

Tendría yo la misma edad que la peliroja de las trenzas, cuando una vecinita americana dejó en mis manos un ejemplar en castellano de las aventuras de aquella niña envidiable.¡Se convirtió en mi pasión! Pippa (así se la nombraba en la portada), era mi sueño: una niña absolutamente libre, divertida, la más fuerte del mundo, con una maleta llena de monedas de oro que le permitía desentenderse de cualquier problema para su sustento; una niña que vivía sola a su aire, pero que, sin embargo, no se sentía sola porque tenía muy buenos amigos y, encima, no habitaba con un vulgar perrito o gatito, no, ella tenía un envidiable caballo y un mono divertidísimo.

Leí aquel libro hasta la saciedad, del derecho y del revés, y me aprendí de memoria la retahíla que venía en la contraportada:

Si alguien le pregunta cómo se llama, ella responde: Pippilotta Delicatessa Windowshade Mackelmint, hija del capitán Efraín Mediaslargas, antes "Terror de los mares" y ahora rey de un pueblo de caníbales. Pero todo el mundo me llama Pippa.

Cualquiera de sus aventuras llenas de despropósitos, me seducía como me seducía su capacidad de inventar y sorprender, tanto a los personajes de ficción que la acompañaban como al propio lector. Mis grandes aventuras de infancia fueron "pippilísticas". Y "El Libro", por excelencia , fue Pippa.

De los tres títulos de las aventuras de Pippa, que había en la Editorial Juventud, sigue vigente uno.